domingo, julio 19, 2009

Moderna pero moderada

Fin del semestre!... pero el trabajo continúa. Al menos ya me olvido de pruebas, trabajos y ensayos hasta agosto. Esta probadita del doctorado me ha dejado con la sensación de que si bien pude haber sacado mejores resultados, al menos las capacidades están (excepto en la Teoría, claro está). Pero bueno, el balance da positivo, aunque el agotamiento mental es difícil de recuperar en un fin de semana largo. Al menos me di el lujo de un día completo hacer nada... andar en pijama por el depto, sin preocuparse del celular, ni de la hora, ni siquiera de lo que iba a comer al almuerzo. Es extraño no tener esa sensación de NO tener que entregar algo al día siguiente. El trabajo sigue, no obstante, pero como es algo en lo que ya tengo experiencia... parece más un alivio de cierto modo.

Si bien las neuronas productivas descansan... las reflexiones no se detienen. La mente sigue y le comienza a dar vuelta a las cosas que quedaron suspendidas por período de exámenes y evaluaciones. Asegurando un par de cosas (como el trabajo docente), empienzan a dar comezón otras cosillas. La vida independiente es agradable, no así pagar cuentas... pero son males necesarios en pos de la independencia, ¿no? No obstante, surge la pregunta del millón... ¿ahora qué? No es que sienta que he completado todas las etapas de mi vida que siento que debería completar hasta ahora... sino más bien que el rumbo se ve tan cierto en algunas cosas. Siento que en cualquier momento me dicen "agarra tu maleta, te vas de viaje largo"... hay cosas para las cuales no se si estoy preparada todavía. Y tengo gente atrás mío que me dice "vamos!, dale!... esto es lo tuyo! sigue no más". Pero no me gustaría pensar que dedicaré mi vida completa al trabajo... o sea, me gusta lo que hago... pero no me gustaría terminar como un profesor querido, que hace poco se le encontró un cáncer y que está solo... una eminencia, pero solo. Ese será mi destino?, irá pasando la gente por mi vida como hasta ahora y se irán así como llegaron?...

Siempre he dicho que la incertidumbre no me gusta, pero he convivido con ella bastante bien. Vivir el presente tampoco ha sido problema, y lo he disfrutado... y lo disfruto hasta ahora, y nada de mal. Pero... ¿hasta cuándo? "no se" sería la respuesta... una de las respuestas que más odio en la vida, pero de la cual no puedo zafarme...

Y así, sigo con las cosas en las que estoy... como si nada... sólo que la "nada" no parece ser un buen plan permanente. ¿Planes?, sí, me encanta esa palabra, aunque a veces no sepa muy bien para adónde... pero al menos a algo, lo que sea... whatever...