jueves, diciembre 25, 2008

Uno más al saco

La experiencia no se adquiere de la noche a la mañana. Creo que es la mejor justificación de cumplir años. Dado el ritual que significa hacerlo: los abrazos, los llamados, los mails y los escritos, hay algo más allá que nos hace ponernos nostálgicos y en algunos casos algo tristes. Es la tontera de pensar en aquellas cosas que no hiciste o que dejaste de hacer por algún motivo. Es el eterno retorno a lo no retornable. Es el aprendizaje y la certeza de no poder volver atrás.

Y no es que quiera hacerlo, estoy en un punto donde las cosas se ven bien y andan bien. Pero no se puede evitar posar la mirada hacia atrás. No es posible evitar el recuerdo y la añoranza. Es parte nuestra, de nuestra forma de ver el mundo, de sentirnos un poco en la montaña rusa sin saber mucho donde va a parar ni en qué forma. Y si hoy estamos en la cima o en el valle, de un momento a otro nuestro estado cambia. Pareciera que ya no es como antes, que se puede estar en un plano constante, la alternancia es más rápida y los cambios nos bombardean los ojos y las neuronas de nueva información y más incertidumbre. Y nos miramos los unos a los otros, buscando la comprensión tácita de que todo está bien y estará mejor mañana, incluso sabiendo que el otro lo cree menos que tú.

Esa sería la mega reflexión del día. Derivado del tiempo libre que puedo disfrutar en estos días. El trabajo ha sido implacable, pero ha rendido frutos. Lo mejor de todo es que mañana no trabajo, es el mejor regalo de cumpleaños que podría haberme dado mi empleador.

domingo, diciembre 21, 2008

Prime suspect

Ya perdí la cuenta sobre la cantidad de pitutos que hecho en estos último 4 meses. Y no es que desee dármelas de "cachetona" ni mucho menos... pero llegan!. Lo que parecía increible hace un par de meses atrás... ahora es una realidad: me llaman por teléfono para pedirme que haga cosas. De seguro la comprobación más increible fue cuando me llamaron para avisarme que había una licitación y que si estaba interesada (y ojalá lo estuviera) me presentara. Mayor sorpresa fue presentarme y saber después que me la gané.

En fin, todo el preámbulo es para justificar mi ausencia en estos meses. Que acompañada de cansancio y mucha lata, me dio una paja tremenda escribir. Y así, tengo una colección de pequeños y grandes hechos que no se si algún día lleve al papel. De momento sólo puedo decir que tengo una ansiedad como pocas, pero también ganas de detenerme un poco y respirar... en mi afán de "vamos, démosle no más" me he agotado y como buen fin de año, se empieza a notar.

Novedades jugosas para el 2009: marzo se viene cargado a la academia. Ingreso finalmente al doctorado y tendré mi primera cátedra de pregrado (a medias, pero por algo se parte). Seguiré haciendo clases en el diplomado y quizás qué otra cosa llueva por ahí. Me quedo expectante en cuanto a eso. Estoy contenta, aunque todavía no puedo saborear mucho.

Y así, me he saltado las declaraciones oficiales... la razón de ello es tener lata de contar toda la historia de este semestre a todos quienes pregunten. Si digo "todo va bien, no hay grandes novedades", la gente no pregunta y yo no explico. Simple. Aunque esto de las redes finalmente me termina pillando... todo se sabe, y la principal sospechosa tiene que explicarse de todas formas. Pero bueno, igual no conozco a tanta gente.

Cosas curiosas: mi ex jefa me ha estado llamando por teléfono, ignoro exactamente para qué... pero mi cabeza y tiempo no ha dado para que me preocupe de eso. Otra nota curiosa es haberme encontrado con un viejo amigo de la infancia, que ya casi ni recordaba del tiempo que no nos veíamos. Cosa curiosa tres, andar boba por los pasillos como mujer enamorada... pero sin reconocerlo. Que conste, las tres cosas son independientes entre sí, no hay relación.

Nada, los días pasan... ad portas de cumplir un año más, qué más da.