sábado, agosto 12, 2006

En fin de semana largo

Sábado... uno de esos días en que no sabes si tendrás un fin de semana piola y/o pajero... o si de un momento a otro se puede tornar un torbellino de cosas juntas en donde casi ni se sienta el pasar de los días. En cualquiera de estos casos, la particularidad de este fin de semana está en que se trata de uno de esos "fines de semana largos" que todo el mundo desea durante el año, por lo que genera expectativas de todo tipo. Yo para no ser menos, ayer trabajé hasta tarde... bajo la idea de que "uhm... adelantar lo más que pueda para no tener tanto que hacer después"... supongo que eso tampoco fue del todo cierto... igual me queda mi "lista de pendientes" para los días que vienen. En fin, estos últimos dos días han sido lo suficientemente movidos como para pensar en este momento en una reparadora siesta... aunque me detiene pensar en las nefastas concecuencias que tendrá en la noche eso (insomnio). De todas maneras... no me haré mucho rogar si sigo cabeceando frente al pc.

Empecé SERCOTEC al fin... el jueves definimos plan de trabajo y todo, así que le dimos el puntapié inicial al proyecto... en perspectiva serían dos meses y medio metida en ese cuento. Espero que no salga tan dilatado como lo fue el proyecto de Valparaíso... no estoy ni ahí con llegar a diciembre y todavía ni estar en la mitad.

Ayer después de la jornada pasé a la oficina de María Lidia, estaba Sofía y nos quedamos con ella hasta tarde... aparte de copuchar su resto, la ayudamos a ordenar unos archivadores con las fichas de egreso de este año... obvio, me encontré con la mía, todos mis papeles archivados junto con un montón de otras fichas de sociólogos egresados, con firmas cuáticas y timbres institucionales... como era de esperar, me puse a mirar otras fichas de puro copuchenta... estuvimos harto rato en eso... tanto que se pasó la hora y no me di cuenta que ya era de noche. Cuando lo noté, me di cuenta también que estaba cansada... y que ya me movía por inercia. Camino a casa suena el celular: "Aló?"... "Hola!... cómo estay?"... "bien, sí..."... "Hay alguna cosa para hoy??". Miré el reloj... eran cerca de las 8:30 de la noche... "No, o sea... yo me voy para mi casa... estoy cansada"... "Pucha que son fomes, y yo que me iba a quedar en Santiago si es que hacían algo"... "Filo, ándate a Rancagua no más... María se fue a Concepción en la tarde... y Sofía también se fue para la casa... no hay quorum"... "Ya, bueno... será... hablamos la otra semana, chau"... "chau...", corté el teléfono con la sensación de que ni siquiera había pensado en la opción de salir en la noche... no se, sólo no lo tenía contemplado... sólo tenía en mente llegar luego a la casa, comer algo porque ya tenía hambre... y después acostarme. Y así lo hice.

Como era de esperar, tampoco me dormí temprano... entre ver un poco de TV... escuchar algo de música... se me pasaron las horas... ya adentrada en la madrugada...me decidí dormir. Tenía la impresión que ya había desperdiciado horas de sueño... pero no creía saludable tampoco quedarse dormida a las 10 de la noche.

Ahora tomé la determinación de una siesta... estaba leyendo un texto en el pc... y me encontré cabeceando... eso no puede ser.

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