La carta

Hace un tiempo recibí una carta... era de una buena amiga que conocí hace un par de años... cuando yo era la "reina del chat" (a ella hace 5 años que no la veo). Sí, de aquella época que quizás no me haga sentir mucho orgullo... pero que al menos me dio la posibilidad de "ver" muchas cosas... jajaja, ciertamente algunas no me gustaron tanto como quisiera... pero en fin... así es la vida no más. Para evitar asociaciones... he cambiado los nombres según mi antojo (uds. ya verán que el antojo tiene una fuente)

Me decidí escribirte, porque aunque no lo creas, he estado muchas veces a punto de hacerlo, pero por diferentes razones nunca termino la carta ni logro enviarla. La razón de que tal vez ahora la haya terminado me dice que la nostalgia de viejos tiempos ha llegado a mi vida, sí, yo creo que tiene que ser eso. Y es que recordé que cuando conversábamos en el "Champañazo" (haahaha..... nunca supe como se llamaba ese local), con una piscola o un vodka tónica, y yo les contaba los malabares de mi vida en general, de mis resentimientos sociales, de mi malograda vida amorosa, etc. etc.... cuando todavía era una pendeja de 24 años, inmadura y que se escudaba en la idea de irse del país para huir "de toda esta mierda de vida"...cuando en verdad era sólo que no sabía qué hacer aquí...

¿Qué ha pasado desde ese entonces?, ni te lo imaginas. ¿Recuerdas que la última vez que nos vimos les conté que había conocido a un tipo con el cual me pasaban cosas?. Sí, Benjamín... el que les presenté cuando me fueron a ver la última vez... y que tú me dijiste (haahaha... me acuerdo bien)... "si no lo quieres... dame su teléfono". Bueno, la cosa es que yo no quería que pasara nada... venía saliendo de mi chascarro con el Eduardo y estaba como tratando de rehabilitarme de esa decepción. No se como, pero Benjamín... con esa mirada de niño, esa sonrisa traviesa.... bueno, ya sabes, igual me tenía un poco descolocada. Pero yo me porté bien, no hice nada, él solito tomó la iniciativa. Es increible lo que puede pasar en dos años o un poquito más, ¿cierto?. Entre que teníamos un romance y entre que peleábamos, porque claro, él se dejaba querer también..... tenía una ex-polola que lo persiguió mucho tiempo y nos hizo la vida prácticamente imposible, y por mi lado, Eduardo apareció de nuevo con promesas que casi creí. Cuento corto: siento que en esos dos años que pasaron desde que conocí a Benjamín mi vida tomó un rumbo distinto.....empecé a trabajar, a ganar mi dinero.... a ser independiente. Le tomé el gusto a tener una pareja que te entienda y te apoye en tus proyectos, así como la importancia de sentirte orgullosa de tu hombre también.... mi problema con Benjamín era que no se tomaba nada en serio.... como era yo antes, no sabía qué hacer con su vida.... vivía a costa de su familia, y mi resentimiento social de clase media siempre afloraba cuando tocábamos ese tema.

Creo que lo más rico de una relación de pareja es cuando ambas personas son capaces de gatillarse cambios mutuos. Siento que aquí pasó así. El Benja me hizo cambiar, y siento que yo a él también. Yo por mi parte me hice un proyecto que antes no tenía.... mi independencia se matizó con la idea de compartir mis logros con quienes quería, y mis metas se armaron al mediano y corto plazo... y aquí, en mi país, ya olvidandome de la idea de arrancar, me arrendé mi depto. propio, me compré cosas, etc. etc. El Benja por su parte, se puso a trabajar... a pesar de ser medio artista, aprovechó sus contactos y se puso a trabajar como coordinador de una galería..... así también se consiguió algunos pases para mostrar sus bocetos y dibujos, no le ha ido muy bien, pero lo sigue intentando. Y en cuanto a nosotros.... bueno, después de todos los atados y problemas, tomamos la decisión de casarnos, y así lo hicimos hace 1 año y medio atrás. Hoy ya soy madre de Matías, un cosito rico de 5 meses.

Estoy tranquila, estoy feliz... tengo casi 30 años y siento que he aprovechado las oportunidades de la vida, a pesar de que al principio se veía todo como nebuloso. Mi nostalgia no es sinónimo de querer devolver el tiempo, si no de pensar que los eventos han ido tan rápido que hoy me permiten saborear eso como un 'pasado'. Se que he hablado sólo de mí, que egoista, ¿no?... es que me siento en deuda de contarte en qué ha ido todo, tantas veces te atosigué con mis dramas, siendo tú tan jovencita.... que estabas empezando la u y esa etapa juvenil tan rica. Si no mal me equivoco hace más de 5 años que no nos contactamos, por lo que supongo ahora debes estar saliendo de la u..... y empezando una nueva revolución de cambios, ¿cierto?. Cuéntame.... quiero saberlo todo. Yo me despido por ahora, quizás la 'patudez' ha sido mucha, pero no creas que fue un acordarse de la noche a la mañana, todavía los recuerdo con cariño. Siempre.